Hoy vengo acompañada de tres términos que, aunque inicialmente nos pueda costar diferenciarlos e incluso muchos de vosotros podríais pensar que son sinónimos, realmente no lo son.  Seguramente a más de uno y más de dos alguna de estas palabras le suena a chino, o quizá las tres, pero bueno, para eso estamos aquí para hacer realidad el refrán de que nunca te acostarás sin saber una cosa más.

¿Listos? ¡Vamos allá! Os presento a los tres protagonistas de hoy: el vaginismo, la vaginitis y la dispareunia. ¿Qué tal vamos hasta aquí? Aunque no sepáis diferenciarlo ¿habíais al menos oído hablar de ellos? Sea como sea no os preocupéis porque vais a salir de aquí con las ideas muy claras y hechos todos unos expertos. ¡Empezamos!

• El vaginismo es una disfunción sexual por la cual la mujer sufre contracciones involuntarias de su musculatura vaginal que pueden llegar a ser muy dolorosas y que imposibilitan el coito. Estas contracciones cierran la vagina cuando ésta detecta la introducción de cualquier objeto, ya sea el pene o por ejemplo un tampón. En este caso las mujeres pueden llegar al orgasmo mediante juegos sexuales y otro tipo de prácticas ya que esta disfunción no está relacionada con la respuesta sexual. Se estima que aproximadamente el 12% de las mujeres en España lo padecen. Podemos diferenciar entre vaginismo primario (cuando el problema ha existido siempre) y secundario (cuando por diferentes causas, de repente, se empieza a sentir dolor al mantener relaciones sexuales). Los factores que lo motivan son diversos, pero cobran especial relevancia los psicológicos por lo que en cuanto se detecte es muy recomendable acudir a un profesional ya que su tratamiento es más sencillo en su inicio.
• La vaginitis es una inflamación de las paredes de la vagina y es sufrida por un 90% de las mujeres en alguna ocasión. En la infancia y la adolescencia es uno de los problemas más frecuentes. Una de las causas que la provocan (en mujeres adultas), suele producirlas una bacteria, pero también cabe la posibilidad de que la generen virus y hongos como la Cándida o la Tricomoniasis. Las alergias o los desequilibrios hormonales son otra causa frecuente de vaginitis. Entre sus síntomas encontramos picor, hinchazón y enrojecimiento de la zona. En muchas ocasiones se pueden encontrar lesiones producidas al rascarnos. En cuanto detectemos algún síntoma hay que acudir a un profesional.
• La dispareunia es la aparición de dolor en el coito (antes, durante y después) tanto en mujeres como en hombres, aunque es cierto que es menos común en el caso de ellos ya que solo afecta a un 4%. En cuanto a sus causas son muchas y variadas: problemas de lubricación o de irritación, vaginismo, enfermedades, cirugías, problemas psicológicos, etc… Los tratamientos tienen que ir de la mano de un  profesional en terapia, y en algunos casos, con medicación.

Como veis las disfunciones sexuales afectan tanto a hombres como a mujeres. En ocasiones el desconocimiento o la vergüenza nos pueden paralizar y hacer que los procesos se extiendan en el tiempo al no ponernos en manos de profesionales. Mi mayor consejo es decirte que te informes, obviamente siempre de fuentes fiables, que dejes de lado los tabús y que por supuesto busques ayuda siempre que lo necesites. Nadie mejor que un profesional podrá acompañarte en el camino para disfrutar de manera plena de tus relaciones sexuales y obviamente si puedo ser yo, ¡mejor que mejor!