No dejes que afecte a tus relaciones y a tu vida.
Terapia de Sequedad Vaginal
Cada vez nos encontramos más casos con esta afección, y aunque antiguamente se vinculaba directamente a la menopausia, cada vez se da también en mujeres jóvenes, que creen erróneamente que la lubricación es sinónimo de excitación.
Algunas mujeres dan por hecho que forma parte de su vida y han normalizado la situación , aunque genere malestar.
¿Qué es la sequedad vaginal y cuándo necesitamos terapia?
La sequedad vaginal es una molestia que puede ir de un grado bajo a una sequedad profunda. Normalmente cuando atendemos a mujeres en consulta su grado ya es bastante alto y es un problema ya grave que afecta a sus relaciones y a su vida en general. Algunos síntomas son quemazón en la zona genital, irritación, grietas, y en algunos casos, incluso sangrado. Afortunadamente tiene solución y no tenemos porqué vivir con ella. Sin embargo, si no se trata puede ocasionar otros trastornos como vaginitis atrófica, atrofia vaginal, sangrado constante, sensibilidad extrema, dolor durante las relaciones sexuales.
¿En qué consiste la terapia de Sequedad vaginal y cuánto tiempo se necesita?
La terapia de sequedad consiste en cambiar hábitos que se han normalizado, dar unas pautas de higiene e hidratación y otros cuidados. Solemos recomendar el uso de una serie especifica de lubricantes no agresivos, y de ser necesario, prebióticos para que se vaya solucionando poco a poco. En la mayoría de los casos basta con una consulta de valoración y recomendaciones, y luego las que desee el cliente para seguimiento.
¿Qué aporta mi terapia de sequedad vaginal?
Se realiza un estudio para ver en qué punto nos encontramos y las causas. Haremos un sencillo test para ver desde cuando lo padecemos, ya que muchas veces no somos conscientes de cuándo ha empezado a haber sintomatología. Finalmente daremos unas pautas encaminadas a solucionar el problema, junto con un listado de hábitos que debemos de cambiar.
Resultado de la terapia de sequedad vaginal
Los resultados positivos son muy altos, ya que en cuanto se localizan las causas, se cambian hábitos y se rehidrata la zona con una serie de productos y ejercicios, el problema mejora considerablemente.
No busques culpables, busca soluciones. ¿Las buscamos contigo?
