Carol Armero

Impulsiva, honesta y a veces demasiado sincera. Después de terminar mis estudios superiores y desempeñar diversos puestos de responsabilidad en diferentes multinacionales que nada tenían que ver con este mundo, decidí dejarlo todo y dedicarme a lo que había ocupado gran parte de mi formación. Me picó la curiosidad y comencé a investigar mucho más sobre el sexo, el erotismo, la pareja y las relaciones afectivo-sexuales. Siempre en un ámbito biopsicosocial. Debido a mis propias experiencias y preocupaciones descubrí las muchas posibilidades que existían, aplicándolas a nuestra salud y bienestar.

También observé que a pesar de la energía y de los beneficios que nos aporta vivir una buena sexualidad, aún era un tema lleno de tabúes y de connotaciones negativas en muchos sectores. La palabra tabú no existe en mi diccionario, los que me conocen lo saben, y si me sigues me irás viendo.

Decidí seguir formándome en varios campos relacionados con la sexología para dedicarme profesionalmente a la educación y orientación sexual, pero de una forma diferente, didáctica pero también divertida. Mi manera de enfocar mi trabajo se adapta a mi personalidad apasionada y creativa, y a mi peculiar forma de ver el mundo: «la vida sin sonrisas no vale la pena», lo que no significa que a mi trabajo le reste seriedad ni profesionalidad.

Después de más de 10 años de experiencia en el sector privado, sigo investigando, formándome y dándome a mis clientes.